Es común en nuestro medio, escuchar que un vehículo tiene algún tipo de ruido de válvulas; lo difícil es verificar si el ruido proviene exactamente de las válvulas o de otro lugar.
Normalmente, con la frase “ruido de válvulas” se conoce a los golpes que suelen escucharse dentro del motor de un vehículo; sin embargo, es importante saber que no todos los ruidos se deben a las válvulas.
Si el ruido es leve, se recomienda calibrar las válvulas en su totalidad y revisar de forma visual que todo esté en orden y no haya alguna pieza del motor fuera de su lugar, o bien, que esté algún tornillo flojo.
Por otro lado, si el ruido es leve, pero las válvulas son de acción hidráulica y operan bajo la presión y fluidez del aceite, lo recomendable es cambiar el lubricante, por uno adecuado para el motor y luego prelubricar los levanta válvulas.
Es importante mencionar que el aceite con mayor viscosidad no siempre será el que mejor lubrique al motor. Cada fabricante de motores estipula los requisitos que debe de cumplir un lubricante para el motor, esto nos dice que no todos los aceites son aplicables a todos los motores.
Si luego de estos procedimientos el ruido continúa o se reduce, pero muy poco, hay que verificar el estado de los ejes de levas. Un eje de levas, regularmente produce un ruido muy similar al golpe de válvulas cuando algunas de sus levas se encuentran con ralladuras o, en el peor de los casos, cuando el eje de levas está torcido.
Para tales casos será necesario retirar la cabeza de cilindros (culata) y llevarla a una reconstructora de motores para que rectifiquen los ejes y hagan las correcciones necesarias.
Cuando el ruido es aún más fuerte
Este se asocia a los pasadores de pistón; cuando existe desgaste por fatiga (movimientos repetitivos), la holgura entre el pasador del pistón, el pistón y la biela se hace más grande y produce un ruido similar al de golpe de válvulas. Para este caso será necesario cambiar los pasadores de pistón y los pistones y a su vez, enviar a rectificar cada una de las bielas del motor.
Existe un último caso en donde el ruido proviene del eje cigüeñal, sólo que en esta ocasión el ruido es mucho más fuerte y en los próximos kilómetros de uso del vehículo necesitará de soporte mecánico. Para tal caso será necesario rectificar el motor por completo y repararlo en su totalidad.
Es un tanto complicado identificar el lugar concreto de donde provenga el ruido, puesto que del motor emanan varios ruidos distintos (admisión de aire, inyectores, poleas, etc.), pero para tal efecto podemos utilizar un estetoscopio automotriz el cual nos hará un tanto más sencillo el trabajo.
