DEFECTO POR AUSENCIA: INCONSTANCIA
DEFECTO POR EXCESO: EXCESO DE
Constancia:Firmeza y perseverancia del ánimo en las resoluciones y en los propósitos.
Las personas constantes repiten no una, sino varias veces, un esfuerzo para alcanzar sus metas y/o respaldar sus decisiones y acuerdos.
La constancia genera un valor enorme en la vida de las personas, genera el posible vínculo con otros. Genera la plataforma de la confianza y guarda las metas de las personas. Parece que, en todo caso, sin ella, la vida de una persona no va para ninguna parte.
La autodisciplina genera el ambiente apropiado para desarrollar la constancia. El deseo de responsabilidad genera la voluntad y entonces, emerge de entre la persona la virtud de la constancia.
A través de su constancia, la persona preserva sus metas de ser destruidas por descuido o negligencia y deja ver el impacto que tiene “una gota constante” para generar un resultado deseado.
Las personas constantes tienen claro por qué tomaron sus decisiones y no están en conflicto con ellas, por lo que son consecuentes a través de sus acciones continuas.
Se entregan voluntaria y totalmente a compromisos y la activación de las causas que detonarán los resultados deseados.
Son constantes desde el principio hasta el final y gracias a ello cosechan el fruto de las fuerzas combinadas de sus acciones repetitivas.
Las personas constantes son pacientes, automotivadas y recrean en su mente, una y otra vez, su anhelo de alcanzar las metas, para poder sostener la voluntad de repetición.
La forma de defecto que se da en las personas con ausencia de esta virtud es la inconstancia.Los inconstantes son personas que se dejan llevar por los momentos y “las ganas”, en lugar de por el complicado y decidido escenario de vivir su diseño de vida.
Pero también sucede, de vez en cuando, que hasta “el constante más constante” cae también en la inconstancia por el desenfoque que puede surgir de no saber administrar bien su tiempo y tareas.
El prerrequisito de la vida feliz es que estemos en posibilidad de engrandecernos a través de metas que alcanzamos paulatinamente, pero el inconstante fluctúa de manera intermitente de una meta a otra, por lo que no libera la suficiente energía para detonar los resultados suficientes en ninguno de sus proyectos. Las personas inconstantes llevan su laboriosidad dentro de muy poco control y no conciben el escenario completo de su vida.
Les aqueja la indisciplina y el caos reina en su mente por lo que no mantienen presentes los fundamentos necesarios para generar la constancia.
Entender el motivo de la inconstancia es el principio de ponerle solución. Algunas veces, la inconstancia es ocasionada por reservas de las decisiones tomadas, nuevas aprendizajes, miedos que no son racionales, desenfoque de la atención o simplemente flojera, pero en todos los casos es superable en cuanto el cambio llega a ser importante para avanzar en la vida.
La forma que toma el intento de exageración de la virtud es la de una especie de compulsión. Es un “hacer” sin razón, sino más bien una acción con poco razonamiento y mucha carga de miedo.
Es muy frecuente que debamos entregarnos al devastado mundo, pero no en consideración de los mismos factores, sino de los factores de vida que escriben la historia a punta de repetición. Recordar el tema de inicio es importante para emprender un camino que tenga sentido.
El punto de la exageración supera a la razón, recuerda poco y repite por inercia, en lugar de por sentido.
Las personas que exageran este aspecto de su vida, recuerdan no sólo la razón inicial por la que iniciaron una acción, pero la recuerdan con temor a no alcanzar sus planes o verse mal si se detienen.
No hay un “preservar la meta” sino un miedo profundo que los impulsa erráticamente a la acción repetitiva de intentos de compensación o control de las circunstancias.
No hay sentido en sus acciones, sino más bien necedad y compulsión.
El éxito de las personas requiere el paulatino aprendizaje y lleva a la vida el intento de ser constante aquel que ha experimentado y observado que a toda acción corresponde una reacción y desea poder construir a partir de ello.
Silvia Larrave
www.silvialarrave.com
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