La pintura da idea de cuánto tiempo y esfuerzo se ha dedicado al cuidado de un carro por dentro y por fuera, en general.
Un carro nuevo debe ser lavado y encerado inmediatamente después de adquirido. Puede parecer exagerado pero, frecuentemente, los fabricantes y agencias distribuidoras, incluso las aduanas portuarias, no poseen áreas destinadas para resguardar los carros nuevos bajo techo y los tienen a la intemperie.
Existen muchos agentes que deterioran la pintura de un carro, los rayos ultravioleta (UV) de la luz solar, los compuestos químicos que se precipitan con la lluvia, el polvo, la arena, rayones, raspaduras, entre otros.
El reto es mantener la pintura automotriz en el mejor estado posible, sin que se nos convierta en una obsesión-compulsión.
Vamos a encontrarnos con diferentes grados de daños en la pintura de la carrocería de un carro, desde los superficiales, hasta los que producen daño en la lámina propiamente dicha.
Debemos tener presente que todo daño que llegue a dejar la lámina desnuda, se debe reparar de inmediato para neutralizar el inicio del proceso de oxidación. Lo más sencillo es dejar el trabajo en las manos de un taller de enderezado y pintura, debidamente calificado y prepare también el bolsillo, porque los honorarios son altos. Existen otros casos, cuando es más barato adquirir la pieza de carrocería, nueva o usada y sustituirla por la dañada, repintarla si no tenemos la fortuna de encontrarla del mismo color y tono.
Pensemos que la carrocería de nuestro carro está completamente enderezada, planchada y lisa. Para llegar a este punto, frecuentemente se hace uso de la llamada masilla, pero se debe evitar su uso lo más posible, porque la masilla es un tipo de material sintético que, con la acción del calor, sea del motor o del sol, se contrae y aparecen grietas o rajaduras, arruinando la apariencia de la pintura automotriz.
En seguida, es necesario utilizar una pintura como base o fondo para proteger el metal de la carrocería, de los agentes ambientales destructivos.
Existen de diferentes tipos y de diferentes colores, como gris, rojo, verde, entre otros.
De estos, el más recomendable es el de color verde, conocido dentro del argot de los enderezadores y ventas de pinturas como “cincromato”, por su capacidad de proteger como anticorrosivo y de adherencia la nueva pintura.
Entonces, se procede a aplicar una capa de cierto grosor; aquí no existe exactamente una receta de cocina, los que hemos aprendido viendo hacer y como autodidactas, sabemos que se debe combinar un poco de ambas maneras, ya que sólo la experiencia (es decir, el proceso ensayo y error), nos puede indicar cuándo una capa es delgada y cuándo es gruesa.
Existen dos caminos para hacer lo mismo, si la reparación es muy pequeña puede obtener una lata de imprimado (“primer”, en inglés), que lo puede adquirir en algunas ventas de pintura automotriz, que es el fondo anticorrosivo que se necesita como base para la capa de pintura.
Asimismo, obtenga una lata de pintura automotriz para hacer el arreglo correspondiente. Va a ser poco probable que encuentre el tono exacto para su carro, por lo tanto, debe conformarse con el tono más cercano que haya en existencia.
Si su arreglo es más extenso, deberá acercarse a uno de los almacenes que se especializan en la venta de pinturas automotrices y llevar una muestra del color que necesita, puede quitar la tapa que cubre el tapón del depósito de combustible o alguna otra pieza desatornillable; allí le venden la cantidad que usted necesita a partir de ¼ de galón, es decir 1 litro.
Respecto al tipo de pintura que necesita, en general, se usa la pintura acrílica con una capa de esmalte transparente. Muchos pintores usan laca, pero no es recomendable para llevar a cabo un trabajo durable y presentable. Existen otros tipos de pintura como la base sintética, semisintética, poliuretano, entre otras.
Para llevar a cabo pequeños trabajos de pintura, se debe limpiar el área a pintar con un cepillo circular de alambre, con una punta de piedra para pulir metales, con el tamaño y forma que sea apropiada que se utilizan con la ayuda de un barreno o bien, con papel de lija de agua, grano entre 300 a 500, según el acabado que se desee.
Se limpia el área a trabajar, se cubre con cinta de enmascarar (masking-tape), las áreas circundantes inmediatas al área a pintar y un poco más allá. Algunas veces se consigue un efecto difuminado colocando, a una altura de unos cinco centímetros de la superficie a pintar, un pedazo de cartón delgado con un agujero al centro de uno o dos centímetros, dependiendo del tamaño de la corrección.
Entonces, se dirige el haz de pintura al agujero de manera que el centro del haz de pintura llegue al lugar de reparación y los bordes queden difuminados; de esta manera se evita que la reparación tenga la apariencia de un parche. Si no quiere que se note la reparación, entonces deberá pintar toda la pieza de la carrocería.
Si el paso del tiempo ha provocado que la pintura del carro, en general, se haya deteriorado y presente manchas blanquecinas, opacidad, grietas o rajaduras, entre otras imperfecciones, no debe haber abolladuras, hundimientos y abultamientos en la lámina de la carrocería, es momento de hacer un trabajo total de pintura. Deberá pulir toda la lámina de la carrocería a modo de eliminar todo óxido, herrumbre, pintura y esmalte que se podría desprender con facilidad y dejar una superficie apropiada para que se adhiera la pintura a aplicar.
Idealmente, habría que desmontar emblemas o logotipos, lámparas delanteras, traseras y laterales, espejos, chapas de cerraduras, manecillas, cristales y sus empaques, parrillas o persianas delanteras, filetes, las 2 placas de los números de matrícula, antena y sus base, deflectores de aire (cola de pato), defensas, parachoques o “bumpers” delantero y trasero, si fueran de diferente color o cromados.
Los empaques de hule y los cristales deberán ser quitados si usted quiere un trabajo perfecto, en realidad muy pocos talleres lo hacen, esto sube el costo del trabajo de pintura. Cuando no se eliminan deben ser recubiertos con la cinta para enmascarar. Una vez que han sido eliminados todos estos accesorios, proceda a cubrir con cinta de enmascarar y papel periódico todas aquellas áreas que no deben ser pintadas, incluyendo cristales y ruedas.
SE NECESITA EL SIGUIENTE EQUIPO:
• Un compresor de aire, con depósito cuya capacidad sea, idealmente, de por lo menos 25 galones, con manguera y pistola de alta presión para pintar.
• Thinner (para laca, conocido también como 1,000), como solvente.
• 2 o 3 recipientes de aluminio o acero inoxidable, con capacidad de 1 litro, no palanganas, para poder hacer mediciones y diluir la pintura.
• Colador o tamiz para poder colar la pintura. Para evitar el trabajo de limpiar estos utensilios y para una colada más efectiva. Yo uso pedazos de medias de nylon, nuevas o usadas pero limpias (del tamaño adecuado).
• Fabrique su propio agitador reusable de pintura, con una pieza de aluminio (pídala en las ventas artículos para ventanería como “platina”) de aproximadamente 12 X 1 X 1/8 de pulgada, redondeada en los extremos.
• 1 extensión eléctrica.
• 1 conjunto de piezas para enderezado de lámina de carrocería.
• Pliegos de lija de agua de diferente tamaño de grano (números de 300 a 600).
• Paños o trapos de algodón para limpiar la pintura de las herramientas.
• 1 barreno.
• Cepillos circulares de alambre, de diferentes tamaños.
• Puntas de piedra o esmeril, de diferentes tamaños.
• 2 trozos de madera de aproximadamente 8 X 6 X 3 centímetros, para envolverlos con lija y poder lijar de manera uniforme las superficies.
• Rollos de masking-tape de diferente ancho.
• Pliegos de papel manila u hojas de papel periódico impreso.
Una vez que usted ha preparado el carro, le ha quitado todos los accesorios posibles y ha recubierto con papel y cinta adhesiva todas las áreas que no deben recibir pintura, usted está preparado para aplicar la pintura.
En general, la pintura deberá ser diluída con el correspondiente solvente, porque si pretende usarla tal y como se la venden, va a estar muy densa y no va a poder salir por el conducto de la pistola de pintar. ¿Cuánto debo diluírla? Otra vez, ensayo y error.
A cada volumen de pintura se le debe agregar, aproximadamente, de un 25 a 30% de solvente o algo más para lograr la consistencia ideal; es decir, agregarle una cuarta parte de solvente.
La pistola para pintar tiene dos tornillos, uno para ajustar la cantidad de aire y otro para la cantidad de pintura que debe salir de ella, así que la primera vez usted debe probar inicialmente con una pieza metálica que no le sea útil.
Tiene también boquillas intercambiables, tanto para pintar expulsando un haz en forma cónica de pintura (útil para pintar en puntos determinados y para pintar áreas extendidas para lo cual la boquilla correspondiente expulsa un haz con forma de abanico), el cual permite pintar de izquierda a derecha o de arriba hacia abajo, dependiendo de la posición en que la enrosque.
Continuará en la siguiente edición…
Armando Orenos Ortiz
Magíster en Educación
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