TALLER AUTOMOTRIZ
-UN NEGOCIO FAMILIAR –
Muchos de los pequeños y medianos talleres automotrices en Guatemala forman parte de lo que conocemos como negocio familiar. El Arq. Jaime Castellanos nos dice que hablar de empresa familiar no significa necesariamente referirnos a empresas pequeñas; pues como ejemplo: 25% de las empresas que aparecen en la lista de las 500 más grandes de la revista Fortune, muestran evidencia de estar relacionadas con una o varias familias propietarias.
También nos recuerda que el hecho de que una familia, esté involucrada en la gestión de la empresa es lo que le da al negocio su carácter familiar.
Para que una empresa sea considerada familiar debe cumplir al menos con los siguientes principios:
- Que una o varias familias puedan ejercer el control en la toma de decisiones.
- Que la familia esté involucrada en la gestión de la empresa.
- Que la familia tenga el deseo de transmitir a las futuras generaciones el patrimonio formado.
- Que haya miembros jóvenes deseosos de continuar con el negocio; y
- Que la familia se constituya en custodio y transmisor del buen hacer profesional de la empresa.
Por cambios ocasionados por diversos motivos como crecimiento, tratados comerciales, uso de nueva tecnología o la competencia, la empresa puede verse obligada a abrirse a otras personas como socios, a quienes deben ceder cargos directivos, aunque los miembros de la familia sigan siendo los accionistas mayoritarios.
En palabras del Arq. Castellanos, Catedrático del curso de Administración del Técnico Superior Universitario en Kinal, cualquier empresa y especialmente una Empresa Familiar debe tener los siguientes fines: ganar dinero, servir, generar autostenibilidad y desarrollar al personal.
Recordemos que el principal baluarte de los negocios familiares debe ser la unión familiar, y ésta debe sujetarse a la disciplina de la administración que se haga del o los talleres, ya que de esto dependerá su buen funcionamiento. Si junto a esto se logra un ambiente laboral agradable, el éxito será el logro natural.
Todo esto supondrá tener una actitud proactiva para adelantarse a los cambios y adaptarse a ellos, en base a mejoras continuas de equipo, pero sobre todo, la preparación académica y técnica de quienes conforman el equipo del negocio familiar.
La dinámica competitiva requiere de una evaluación de los procesos de funcionamiento del negocio, para realizar así los cambios necesarios traducidos en: control de gastos, evaluaciones de desempeño, manejo de suministros y capacitaciones.
Puesto en práctica todo esto, el principal beneficiado será el consumidor final, nuestro cliente y por consiguiente, la misma empresa familiar.
En Escuela Técnica Superior Kinal, además de preparar técnicos en mecánica automotriz, también contamos con cursos a la medida de cómo administrar y proyectar un negocio familiar. Sea parte del cambio que el país requiere, contáctenos y asegure la permanencia y crecimiento de su Negocio Familiar.
Invertir en capacitación será la mejor oportunidad de desarrollo del Negocio Familiar.