Como veníamos comentando en artículos anteriores, es urgente para el planeta y la supervivencia de sus especies incluido el ser humano, claro el aseguramiento de las fuentes de agua potable a través de una reducción en el consumo y de una disminución real de la contaminación de los cuerpos de agua…
Es lamentable ver como segundo a segundo, inmensas cantidades de desperdicios y contaminantes de todo tipo y procedencia llegan a nuestros ríos, lagos, lagunas y océanos, no sólo aniquilando la vida que en ellos habita, sino haciendo imposible el acceso de la población a un agua de calidad.
Por esta razón, hoy queremos hacerte algunas sugerencias para reducir la contaminación desde la casa o el trabajo.
Todos los aceites que utilizamos (de cocina, de motor u otros) son grandes contaminantes de agua y por ello nunca deben ser arrojados por los sifones o cañerías. ¡Recuerda que un litro de aceite arrojado al desagüe contamina hasta mil litros de agua! Por eso, envasa los aceites en frascos; cuando estén llenos y debidamente tapados tíralos con el resto de la basura.
Al lavar con lavaplatos líquido, dilúyelo con 3 partes de agua. Esto no sólo hará que rinda más el lavaplatos, sino que reducirá la cantidad de contaminantes que descargas en el agua tras cada lavada.
Para lavar la ropa prefiere detergentes biodegradables. Los detergentes de lavadora, por ser sintéticos y grandes generadores de espuma, son unos de los más contaminantes del mercado. Si deseas otras opciones puedes reemplazar el detergente por bicarbonato y añadir una copita de vinagre. Ambos son desinfectantes y excelentes limpiadores. Si utilizas un detergente ecológico podrás además usar el agua del enjuague para tu jardín y así reciclaras la carga completa de tu lavadora.
Evita a toda costa arrojar basura en la calle, especialmente bolsas y empaques plásticos. La lluvia arrastra la basura hacia los desagües y cuerpos de agua y la mayoría van a parar a los océanos, ríos, lagos y lagunas.
No utilices los desagües como depósitos de basura y vela porque tus desechos lleguen siempre al destino adecuado (bote, basureros, rellenos sanitarios, etc.)
Si quieres ir un paso más allá, piensa en la posibilidad de instalar en tu casa o lugar de trabajo, sanitarios ecológicos (secos o de compostaje). Esto reducirá el ingreso de materia contaminante a los cuerpos de agua, facilitará los procesos de depuración en las plantas y reducirá los costos de saneamiento.
Investiga, aprende, participa, exige. ¡El agua es de todos!
