Parte IV
La información negativa (comentarios, noticias, chismes) destruyen la iniciativa, la motivación, la actitud positiva, la fortuna, el éxito y la salud; cuida a qué información le pones atención. En nuestro medio, el 95% de la información que recibimos es negativa.
La sugestión es algo muy poderoso. Si una persona en la mañana te pregunta: “¿qué te pasa?, te ves mal”, tú te contestas: “qué raro, yo me siento bien”. Pero te encuentras a alguien más y te dice: “te ves pálido, ¿estás enfermo?”; seguramente ya empiezas a dudar el cómo te sientes y, puede que te inventes un malestar o enfermedad. Prácticamente te has sugestionado con lo que te dijeron; por eso, ¡cuidado con la información que escuchas!, puedes sugestionarte negativamente.
Muchas veces buscamos modelos por falta de confianza en nosotros mismos, cuidado con el modelo que escoges para alcanzar tu éxito.
¿Cuál es la clave del ÉXITO?
La clave del éxito en todas las áreas de la vida se llama: SERVIR.
¿Qué significa SERVIR?
Significa dar, ayudar, solucionar problemas, satisfacer necesidades, gustos, deseos, dar mantenimientos, dar cuidados, reparar, agradar, dar felicidad, complacer, dejar contento, dar un buen trato, dar un buen funcionamiento; todos estos son sinónimos de SERVIR.
¿Qué se requiere para SERVIR BIEN?
Se requiere trabajo, esfuerzo, tiempo, conocimiento, inteligencia, preparación, especialización, estudio, entrenamiento, práctica, dedicación, constancia, persistencia, orden, desarrollo personal, cuidado, atención y calidad; todo esto es parte del servicio.
¿Qué comprende o abarca el buen servicio?
El tamaño, la rapidez, la actitud, la presentación, la apariencia, el aspecto, la belleza, la eficacia, le eficiencia, los accesorios, la calidad y cantidad, la durabilidad, el cumplimiento, la puntualidad, la decoración, el lujo, la limpieza, el seguimiento a la venta, las explicaciones sobre tu producto o servicio, la sonrisa, la claridad de una explicación, la paciencia, que vayas bien vestido; casi todo es parte del servicio.
La forma correcta de pensar es: “YO pienso… a cuántos voy a servir, NO cuánto voy a ganar”. Si tú sirves bien, vas a ganar bien; el servicio determina el valor de las personas y las cosas; lo que sirve más, vale más; lo que sirve menos, vale menos. El éxito en todas las áreas ES EL SERVIR BIEN. Todos andamos buscando que nos sirvan. En alguna oportunidad hemos necesitado que nos reparen la computadora, la estufa, los baños, el automóvil, nuestra dentadura… necesitamos servicios. Ahora, ¿qué hacemos con un automóvil que no sirve?, lo cambiamos; ¿qué hacemos con colaborador que no da resultados?, le damos las gracias y buscamos otro; aunque también lo podemos capacitar, entrenar, preparar si él quiere y se esfuerza, sino tendrá que irse.
El esposo le sirve la esposa, la esposa al esposo; si no lo hacen, hay problemas en el hogar tarde o temprano y pueden llegar hasta separarse. El empresario le sirve a sus clientes, de lo contrario lo cambian. El empleado le debe servir a su patrono, sino lo cambian también. Ustedes leen este artículo porque les sirve. Preocúpate por servir y servir a la mayor cantidad de personas posible, después preocúpate por llegar a ser un mejor servidor.
Cada mes debes ser mejor servidor que el mes pasado. Un servicio barato regularmente tiene muchas deficiencias y mínimas satisfacciones; un servicio con un costo mayor cubre exigencias altas y provoca mínimas insatisfacciones. Posiblemente si te pagan poco es porque lo que haces vale poco. Si hay compañeros que ganan mucho, es posible que lo que hacen vale mucho.
No huyas de las exigencias; no te metas donde están el montón y no te exigen nada. Si estás entre el montón no puedes destacar, no te notan, no te ven. Preocúpate por cubrir las exigencias a nivel de cuidado y atención de detalles. Recuerda: “El éxito está en la suma de los detalles, pero el éxito nunca será un sólo detalle”. En las olimpiadas, los ganadores, los “Número Uno”, han dejado a sus rivales por milésimas de segundo, por uno cuantos centímetros; ahí se encuentran los triunfadores, los que dan ese minuto o centímetro más para destacar sobre todos los demás; ese pequeño detalle adicional se logra cuando pones el máximo cuidado en todo lo que haces y dices. No le huyas a las exigencias, ellas hacen una mejor persona de ti. ¡ÉXITOS!
